¡Cómo es la gente!
¡Cómo es la gente! ¿Os habéis fijado? Durante años les hemos estado diciendo que engordar es una cuestión de balance energético, que «si nosotros engordamos es porque comemos más de la cuenta«. Y les hemos repetido una y otra vez que la solución evidente es comer menos y hacer más ejercicio (ejemplo). ¡Y lo entienden mal! Entienden que lo que queríamos decir es que la solución es comer menos y hacer más ejercicio, cuando en realidad lo que queríamos decir era «comer mejor». ¡Cómo es la gente! ¿Es que no era obvio?
Si es que la gente entiende lo que quiere entender.
No vuelvo a engordar 
Todos los jugos (licuados, jugos mezclados y solos) deben tener un límite de 150 calorías, mientras que el azúcar en bebidas lácteas debe reducirse en un 20%, con un límite de 300 calorías en productos que probablemente se consuman en una sola ocasión.
Es inexplicable que la gente entienda que lo que tiene que hacer es seguir comiendo lo mismo pero en menor cantidad.
Dos problemas: el ego y el económico. Por un lado, los charlatanes que han estado ganando dinero con la pseudociencia del balance energético no pueden reconocer que han estado engañando a sus clientes.
Y por otro está el ego. No vamos a escuchar de sus bocas que han estado repitiendo con toda arrogancia la que sin duda es la mayor estupidez de la historia de la humanidad. Te van a decir que les estás malinterpretando, que ellos no han dicho eso, que lo explican muy bien en sus libros, y, sobre todo, tratar de lanzar mensajes confusos a los que aferrarse cuando son desenmascarados: «las calorías importan pero importan más tus hormonas». Los charlatanes nunca rectifican: incrementan su arrogancia cuando se ven entre la espada y la pared.
Cuando nos decían que cualquier dieta que funciona lo hace porque te hace «comer menos», querían decir «comer mejor». Y nosotros empeñados en no entenderles.
Cuando dice «lo que funciona es lo de siempre» y en la imagen pone «restricción calórica», lo que quiere decir es «comer mejor».
Todos vemos claramente dónde dice «que te hacen comer mejor».
Gracias Vicente por tu blog. Me parece muy didactico y me encanta su tono, en ocasiones tan sarcastico.
Es preocupante, que profesionales formados con carreras, masteres y demas titulos/certificados sigan insistiendo en que la solucion para perder peso sea una operacion matematica simple que ignora la tremenda complejidad de la fisiologia.
Hola Roberto,
gracias a ti por leer lo que escribo.
Llevamos 80 años tratando la obesidad ¡¡¡¡con una resta!!!! y, en consecuencia, convencidos de que la fisiología no es relevante. Es inexplicable que una persona con una titulación universitaria, la que sea, casi que da igual, carezca de la mínima capacidad para detectar el fraude. Ni intelecto ni autocrítica. Y es inexplicable que en nuestras universidades se esté adoctrinando en pseudociencia.
Cuando ves a personas pasadísimas de peso explicar que adelgazar es tan sencillo como comer menos de lo que se gasta, te das cuenta del mundo en el que vivimos.