Experto en nutrición revoluciona la economía
— Sus ideas han causado una auténtica revolución en el mundo de la economía. ¿Puede contarnos cómo empezó todo?
— Claro. En realidad es muy sencillo. Todo empezó cuando me planteé de dónde salían los beneficios de las empresas:
Beneficio = Ingresos – Gastos
— Y me dije, ¡coño, si esto es como la fórmula de las calorías! Y me di cuenta de que podía aplicar los mismos principios que ya estaban triunfando en el mundo de la nutrición. Lo vi muy claro:
Si quieres mejorar los beneficios, aumenta los ingresos y reduce los gastos
Fíjese en lo importante del hallazgo: con una única ley era suficiente para gestionar una empresa con éxito. Y cuando se lo conté a los empresarios se quedaron estupefactos. No se podían creer que no se hubieran dado cuenta antes.
— Aumenta los ingresos y reduce los gastos. Es de una sencillez que ¡te quita la respiración!
— Pero además, muy fácil de poner en práctica. Fíjese:
¿Quiere aumentar los ingresos?
- Aumente el precio de los productos
- Venda más productos
- Venda el local
- Venda la maquinaria
¿Quiere reducir el gasto?
- Pague menos a los trabajadores
- Despida trabajadores
- No pague impuestos
- Prescinda del servicio de limpieza
- No mantenga la maquinaria
- Fabrique productos de peor calidad
- No pague a los proveedores
Lo mejor es combinar medidas que aumenten los ingresos con otras que reduzcan el gasto.
— Sin duda es una revolución. ¿Cree que sus ideas funcionarán?
— Por supuesto. No pueden fallar. Se basan en una ley básica: «si aumentas los ingresos y reduces los gastos vas a tener más beneficios».
— ¿Puede su enfoque ayudar a entender el origen de la actual crisis económica?
— Sin duda. Por razones que no entiendo por completo, los empresarios se volvieron menos ambiciosos y más derrochadores. Y claro, si reduces el beneficio y aumentas el gasto, las leyes básicas de la economía dicen claramente que los beneficios van a desaparecer. ¡Nadie puede violar esas leyes!
— ¿Y aporta Usted soluciones para salir de la crisis?
— La solución pasa por hacer entender a los empresarios que si no ganan más de lo que gastan, la empresa no va a ser viable. Hay que aumentar los ingresos y reducir los gastos, así de simple. Por ejemplo, pueden calcular cuánto gastan y ajustar sus ingresos para que estén un poco por encima de los gastos. Y poco a poco la empresa se irá recuperando.
— ¿Qué opina de los que dicen que para llevar una empresa con éxito sus ideas no aportan nada, que es necesario entender cómo funcionan el mercado y las empresas?
— Hay que huir de soluciones simplistas para un problema complejo. En esto de la economía no hay atajos, ni soluciones milagro. Los otros enfoques son teorías que no funcionan, incompatibles además con las leyes básicas de la economía. A corto plazo puede que den algún resultado, pero a largo plazo será peor para la empresa. Lo importante es que se trate de medidas sostenibles.
— Muchas gracias por atendernos. Ha sido un placer.
— Gracias a Usted.
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Y éste es el retrato de unos burros:
No vuelvo a engordar 
Vicente, me parece una entrada muy inteligente y astuta.
Has plasmado una realidad con un ejemplo muy cotidiano y a la orden del día, hecho que ayuda a comprender el sistema de lo que ocurre en la nutrición.
Tienes unas ideas estupendas para crear artículos, ¡me encanta!
Un beso fuerte.
Hola Elena,
muchas gracias por el comentario, ¡me alegras el día!
Se agradece no estar solo.
Un beso 🙂
Noticia de última hora: un estudio ha demostrado que las empresas con problemas económicos han tenido una disminución en su balance monetario, ingresos menos gastos, confirmando que la causa de la crisis económica ha sido una disminución de los ingresos y un aumento de los gastos. Las autoridades están desarrollando un plan de acción para concienciar a los empresarios de que deben ganar más dinero del que gastan. Se considera clave en dicho plan educar a los niños sobre los beneficios de mantener un balance económico positivo.
Esta entrada va directa a mi muro de Facebook. ¡Tremenda!
A ver si un par de burros que yo conozco se ven reflejados 🙂
Seguramente les entrarán ganas de montar un negocio, en cuanto entiendan lo sencillo que es hacer que funcione.
Leído por ahí: «aunque tengas la insulina siempre baja, para engordar es necesario que exista un balance energético positivo» (que traducido al cristiano es: «sí, sí, todo eso de la insulina son bobadas, la realidad es que si no comieras tanto no estarías hecho una bola»).
Traducción al lenguaje económico: «aunque crees una imagen de marca, tus productos ofrezcan una excelente relación calidad-precio y tengas la mejor atención pos-venta del mercado, mientras no ingreses más de lo que gastas no tendrás beneficio«. Tan cierto como estúpido e inútil.
Lo que sucede en el mundo de la nutrición es sencillamente increíble.
Todo negocio exitoso ingresa más dinero del que gasta, luego cualquier consejo económico exitoso se basa en aumentar los ingresos o reducir los gastos. Que no te cuenten milongas.
Usar la teoría del balance energético en nutrición equivale a dejar las decisiones de la empresa en manos del contable, en lugar del director general, y asumir además que tomar medidas para «ingresar más » o «gastar menos» no tiene consecuencias en el funcionamiento de la empresa. «Beneficios=Ingresos-Gastos» no habla de que haya efectos, luego hablar de esos efectos es una «distracción».
Ya sabes, «si la empresa va mal es porque ingresa poco respecto de lo que gasta», y, a partir de ahí, está claro que la solución a los problemas pasa por aumentar los ingresos y/o reducir los gastos.
Era cuestión de tiempo que los verdaderos expertos en obesidad se unieran a la fiesta.