Etiquetado: Miguel Franco
«Consumieron el doble de calorías y perdieron 30 kg cada uno»
A unos monos que viven en el zoo Cleveland Metroparks se les cambia la dieta. Se abandona la dieta basada en ingredientes y se adopta una dieta basada en productos naturales: «lechuga romana, hojas de diente de león y endivias que se rasgan y muerden con suavidad, heno de alfalfa que cortan con destreza, ramas de árboles jóvenes que se despojan de suculentas cortezas y hojas, judías verdes, un puñado de semillas de lino y tres multivitaminas Centrum Silver metidos dentro de un plátano.»
Ésta era su dieta anterior:
Although they take in twice as many calories on the new diet, after a year, the big boys of the primate house have dropped nearly 65 pounds each and weigh in the range of their wild relatives. (fuente,fuente)
Aunque en la nueva dieta consumen el doble de calorías, después de un año, los niños grandes de la casa de los primates han perdido casi 30 kg cada uno y están en el rango de peso sus parientes salvajes.
¿Cuál era el problema de su anterior alimentación? Pues en un reportaje (ver) nos cuentan que aunque el pienso que les daban en forma de galletitas estaba lleno de nutrientes, las galletitas eran altas en calorías. ¿Altas en calorías? ¿Cómo puede ser el problema que eran altas en calorías si al cambiar la dieta consumen el doble de calorías y han bajado de peso? Un nuevo episodio de Los Misterios de la Calorexia.
La dieta engordante era engordante por sus calorías, aunque tenía la mitad de calorías que la no engordante
Como he explicado insistentemente en el blog, la Teoría CICO sólo permite que dos de los tres términos de la (falsa) ecuación del balance energético puedan variar por sí mismos (ver,ver,ver). Serían los términos 1 y 2 en la siguiente ecuación:
En base a esa premisa injustificada, esa teoría obliga a que cualquier cambio en la energía almacenada en el cuerpo tenga que explicarse por cambios en la ingesta energética o por cambios en el gasto energético. Esa teoría no permite que el término 3 varíe por sí mismo, y, en consecuencia, no permite que la explicación a por qué cambia la energía acumulada se pueda encontrar en la fisiología del tejido implicado, que es parte del término 3. Hay otras premisas injustificadas, como suponer que la única energía que puede cambiar es la energía acumulada como grasa corporal, y por eso he dicho que se usa una falsa ecuación del balance energético, pero no las explico por no alargar más esta entrada.
En este cambio de dieta a los monos lo que se ha visto es que:
con una dieta basada en los productos que encontrarían en su hábitat natural, los monos han bajado de peso. Y además se sabe que han comido casi el doble de lo que comían con su dieta anterior, en términos de calorías.
Lo primero que quiero resaltar es que: la solución que se ha encontrado ha sido cambiar a una dieta adaptada a esa especie animal. Si al analizar este experimento nuestras elucubraciones nos llevan a concluir que se podría haber conseguido lo mismo de otra forma, sencillamente estamos cambiando lo que se ha comprobado en este estudio y sustituyéndolo por conclusiones de nuestra invención.
Si damos por bueno el paradigma CICO, y sabiendo que la ingesta prácticamente se ha duplicado, la explicación sólo puede estar en el gasto energético: los monos han aumentado su gasto energético y eso ha causado la reducción en el peso corporal. La estupidez que llevamos adorando 80 años es creer que esta forma de «razonar» viene dictaminada por las leyes de la física (ver). Otros comportamientos del cuerpo son posibles: el cambio hormonal asociado al cambio de dieta podría haber afectado directamente al tejido adiposo (y a otros órganos, obviamente), fomentando la liberación de grasa corporal. Y el gasto energético se podría haber adaptado a las nuevas necesidades de disipación de nutrientes en forma de calor. ¿Viola este comportamiento fisiológico alguna ley de la física? No, y que sea plausible retrata la Teoría CICO como la pseudociencia que es (ver,ver).
Si interpretamos este experimento bajo el prisma de la pseudocientífica teoría CICO, llegaríamos a la conclusión de que simplemente lo que sucede es que ahora los monos ¡¡se mueven más!! Si eso es así, manteniendo la dieta anterior —¡que tenía menos calorías!— y poniendo en marcha un plan de ejercicios para los monos, tiene que ser incluso más fácil (y más económico) para los monos adelgazar que con su nueva dieta. En definitiva:
- Mantenemos la dieta engordante, ignorando las consecuencias reales de su uso, que ya se conocen.
- Ignoramos los resultados obtenidos por la dieta basada en productos naturales.
- Proponemos un plan de acción basado en una teoría pseudocientífica, sin ninguna garantía de éxito.
Insisto: si interpretamos la realidad empleando el paradigma equivocado, podemos acabar descartando lo que ha demostrado funcionar y, a cambio, mantener la dieta que ha demostrado ser engordante. Si intentamos resolver un problema con la misma —errónea— forma de pensar que lo ha creado, lo más seguro es que no resolvamos nada. Es importantísimo, en mi opinión, entender que la Teoría CICO se basa en premisas injustificadas o, de otro modo, seguiremos creyendo estúpidamente que es la única forma «científica» de enfocar el problema de la obesidad.
Quiero recomendar el siguiente vídeo. No es muy largo y es fantástico.
Leer más:
- Daniscience (alias Sprinter) (2/2)
- CICO sólo considera 2 de los 3 términos de la ecuación: los términos CI y CO