Lo que se publicó sobre las dietas y las calorías hace 69 años (2 de 2)
(Ir a la Primera parte)
Los participantes son sometidos a una dieta de tan solo 1000 Calorías. Hay cuatro versiones, una con un 90% de carbohidratos, una con un 90% de proteínas, otra con un 90% de grasas y otra con mezcla de macronutrientes.
Si contar las calorías de la comida sirviera de algo, los participantes deberían perder la misma cantidad de grasa y peso, independientemente de la composición de la dieta. Pero no es eso lo que sucede:
- con la dieta alta en hidratos de carbono, algunos participantes ganan un poco de peso, otros lo mantienen y otros pierden un poco, ¡consumiendo solo 1000 Calorías/día!
- con las dietas altas en grasa y alta en proteínas los participantes sí pierden peso.
En la gráfica se muestra la pérdida de peso diaria (en gramos), y puede observarse que la pérdida de peso de los participantes es máxima con la dieta alta en grasa:
En palabras de los autores del estudio:
Los ritmos de pérdida de peso eran tan diferentes que la composición de la dieta pareció sobrepasar en importancia a la ingesta calórica. […]
Sobre eso se ha argumentado que, si es el déficit calórico en solitario el que determina la pérdida de peso en personas con obesidad, dietas con el mismo contenido calórico deberían producir la misma pérdida de peso en el mismo paciente, sin importar la composición de la dieta. Es evidente que no lo hacen, como puede verse en los pacientes de la serie 2 [el experimento que estamos comentando]
No se detectó una falta de absorción de las grasas/proteínas (se absorbió el 95-97%).
No se detectó que se estuviera perdiendo músculo («consumiendo proteína endógena»).
La proporción de agua en el peso corporal se mantuvo «sorprendentemente constante» a lo largo del experimento. En los sujetos que siguieron las dietas altas en grasa o proteína entre un tercio y la mitad del peso perdido era agua. En los sujetos que siguieron la dieta alta en hidratos de carbono no se perdió ni peso ni agua. Eso con 1000 Calorías… ¡Qué fuerte!
Conclusión de los autores del estudio:
Puesto que la composición de la dieta altera de forma tan notable la tasa de pérdida de peso, se sugiere que los pacientes obesos alteran su metabolismo en respuesta al contenido de la dieta.
Las calorías no pueden explicar estos resultados. Hablar de «contenido calórico de la ingesta» es sumar pan con mantequilla, y eso no tiene ni sentido ni utilidad práctica.
Muy bueno este estudio, Vicente. Con tu permiso, me lo ficho para futuros debates en la selva del balancecaloriquismo 😉
Hola centinel,
échale un vistazo al original, porque quizá haya algún resultado más que te parezca interesante. Hay otro artículo «vintage» que me gustaría haber hojeado, pero no lo he podido conseguir (Lyon y Dunlop, comentado en esta página). Suerte en la selva 🙂
Vicente, te envió un mensaje que le envié hace tiempo a Luis «Centinel»:
En relación con el libro Good Calories, bad calories, en determinado momento verás que hablan de Vilhjamur Stefansson, un antropólogo que estuvo viviendo con los esquimales de Canadá durante 11 años. A su vuelta, participó en un experimento que duró un año durante el cual solo comió carne (parte magra y parte grasa), sin que se observaran ningún síntoma de enfermedad. El estudio se publicó en el Journal of Biological Chemistry en 1930. Te incluyo también la URL:
Haz clic para acceder a 651.full.pdf
No es un artículo muy largo, y creo que es interesante desde el punto de vista médico, por lo atípico del hecho y de las conclusiones.
Gracias por el aporte, oscaretu 🙂