¿Cómo reaccionas tú cuando alguien te engaña? SHARP
These benefits are substantial and suggest that widespread use of LDL-cholesterol-lowering therapy in patients with chronic kidney disease would result in a worthwhile reduction in cardiovascular disease complications in this high-risk population
Estos beneficios son sustanciales y sugieren que el amplio uso de terapia para reducir el colesterol LDL en pacientes con enfermedad renal crónica podría resultar en una reducción valiosa en las complicaciones de la enfermedad cardiovascular en esta población de alto riesgo.
Estudio aleatorizado con doble ciego de estatina+ezetimibe frente a placebo en 9270 pacientes con enfermedad renal crónica, una condición asociada a un mayor riesgo cardiovascular. Seguimiento medio de 4.9 años.
El LDL se redujo en 33 mg/dl, en término medio.
Comparación de mortalidad entre a) bajar el LDL con fármacos o b) placebo, es decir, no tocar nada:
Placebo better…
Más muertos entre los que tomaban la medicación que entre los que tomaban placebo. Cinco de cada mil personas morirían antes por culpa de la medicación para bajar el LDL. Los 995 restantes no obtendrían más beneficio que los efectos secundarios.
El gran riesgo de tener el colesterol «alto» es que un médico incompetente/corrupto te puede recetar medicación para bajarlo. Si te sucede eso, dile que prefieres «placebo»: menos muertes y menos efectos secundarios.
NOTA: Uno de los firmantes del artículo es el famoso Rory Collins, un tipo que dice que las opiniones contrarias a las estatinas «matan» y que ha pedido, afortunadamente sin éxito, que sean vetados artículos que hablan de los efectos secundarios de las estatinas (ver). Este señor se niega a mostrar a otros investigadores los datos originales de los ensayos clínicos en los que participa y la unidad que dirige (el Clinical Trials Service) ha recibido cerca de 500 millones de dólares de la industria farmacéutica (ver,ver). No cabe ninguna duda sobre qué motiva su defensa de las estatinas.
Leer más:
de Lorgeril, Michel. «Cholesterol and statins: Sham science and bad medicine«