«Tenemos que dejar de recomendar tratamientos inefectivos para pérdida de peso»
«Dietary treatments for obesity are ineffective«
Artículo en el BMJ de hace 22 años y es de lectura imprescindible. Voy a hacer un breve resumen, pero recomiendo absolutamente su lectura.
Los autores nos dicen que los métodos para pérdida de peso no funcionan y que, con lo que se conoce en ese momento, no se puede seguir culpando a las personas, sino que el culpable es el método:
a failure not of those people but of the methods of treatment that are used.
un fallo no de esas personas, sino de los métodos de tratamiento que se usan.
Luego explican que de haber una alternativa, ya se habrían abandonado las dietas hipocalóricas por inefectivas, pero no se ha hecho porque no tienen una alternativa, y reconocer que no saben qué hacer para adelgazar dejaría a muchos especialistas sin trabajo. Y rebaten el argumento de que «no se puede no tratar la obesidad sin investigar más sobre los efectos del no-tratamiento«, explicando que la carga de la prueba recae en los que abogan por el tratamiento: lo que hay que demostrar es que el tratamiento funciona. No está justificado, nos dicen, dar un tratamiento sólo porque la sociedad exija que haya un tratamiento.
En la parte final comentan los problemas sociales por los que atraviesan las personas obesas, y en concreto el coste de los prejuicios contra ellos, y de culparlos de su condición. Y explican que esos prejuicios se fomentan cada vez que un doctor recomienda a su paciente un método de pérdida de peso que no funciona: ¿a quién se le echa la culpa del fracaso, al reputado doctor o al paciente? Todos sabemos la respuesta: se culpabiliza al obeso del fracaso del método, y haciéndolo se alimentan los prejuicios contra los obesos.
No se puede hablar más claro: «tenemos que dejar de recomendar tratamientos inefectivos para pérdida de peso«, «sólo reconociendo que nuestros tratamientos no funcionan, y demostrando que lo decimos en serio absteniéndonos de recomendarlos, se puede empezar a deshacer un siglo de llevar a las personas gordas por el camino del fracaso«.
Esto fue escrito hace 22 años. El método recomendado era el mismo que se recomienda ahora, el «come menos y muévete más», y no había duda de que no funcionaba. Han pasado más de veinte años y nada ha cambiado: el mismo método sigue cosechando los mismos fracasos. Y los profesionales de la nutrición y la salud, ahora como entonces, jugando con la vida y la salud de la gente desinformada que comete el error de depositar en ellos su confianza. Ahora como entonces, los expertos recomiendan una dieta milagro en lugar de reconocer que no saben de un tratamiento efectivo para la obesidad.
He sido obeso y no salgo de mi asombro.
Leer más:
El profesor de nutrición y epidemiología Frank Hu en Harvard dijo: «la evidencia actual indica que una pérdida de peso clínicamente significativa puede ser alcanzada con diversos enfoques dietarios»
Nunca aceptes la palabra de nadie en este tema. Pide las pruebas, los datos. Porque llevan décadas mintiéndonos.
Marion Nestle, que al parecer no conoce la vergüenza: «To lose weight, reducing calorie intake below expenditure works every time.«
Consejos para adelgazar del Departamento de Salud de Estados Unidos. No dan ni una sola prueba científica de que lo que dicen funcione.
Una decepción: Bill Lagakos, que no tiene argumentos para defender sus creencias:
El éxito de cualquier intervención dietaria está determinado principalmente por el seguimiento
Es decir, la culpa es de la persona, no del método. ¿Pruebas? Ninguna, porque esto no es ciencia, es charlatanería.
Otro fenómeno: Yoni Freedhoff, supuestamente luchando contra la obesidad, y en realidad no haciendo otra cosa más que agravar el problema:
NOTA: Lo de la prepotencia entre los contadores de calorías no puede ser casual.
Steve Parker, MD:
El problema es que la gente que vuelve a sus vieas formas de comer recuperan gran parte del peso perdido, típicamente empezando seis meses tras el inicio de la intervención.
Al menos tuvo la entereza de reconocer que no podía probar su opinión. Pero no es suficiente, cuando lo que se está haciendo es tan dañino para las personas con problemas de peso.
«No sigas una dieta hipocalórica, salvo que tu objetivo sea engordar«
Science-based medicine, demuestran que no son más que unos cantamañanas con ínfulas:
¿Qué evidencia, señores de Medicina Basada en la Ciencia? Lo dicho: no puede ser casualidad lo de la prepotencia entre los contadores de calorías.
(Fuente)
El fraudulento balance energético está obstaculizando que se encuentre una solución eficaz para la obesidad, si es que eso es posible.
Hay catetos que dicen que que se sepa que el método no funciona es peligroso porque hará que las personas obesas no se esfuercen por perder peso. A ver, catetos, si el método no funciona, ¿qué sentido tiene esforzarse? Este tipo de memeces sigue centrando la atención en la supuesta falta de voluntad de los obesos, en lugar de centrarse en la verdadera causa del problema: la falta de inteligencia de los expertos.
«restrictive diets should no longer be recommended or promoted»
He conocido a muchos «maestrillos» que recomendaban tratamientos para perder peso y lo peor es que hasta salían publicitados en periódicos locales o escribían algún libro y claro, pues te fías de la reputación. Gracias a esos «maestrillos» estuve demasiados años con un hipotiroidismo mal diagnosticado. Mientras hacía ejercicio, era muy estricto con mi dieta y aún así no bajaba ni a tiros. Los chascarrillos de «algo estarás haciendo mal», «a ver si hacemos la dieta en serio», etc. estaban en la mayoría de consultas a las que iba muerto del asco. Ahora, aunque medicado de por vida (y no quiero decir que con esta medicación me pueda tocar las narices y bajar la guardia) voy controlando los carbohidratos y ¡voilà! bajo de peso de forma efectiva, sin pasar hambre. He hecho otras dietas y la que mejor me funciona es la que es baja en carbohidratos. Si es que hasta he experimentado conmigo mismo, porque el nivel de cachondeo en algunas consultas es preocupante. Yo me pregunto, si un profesional no hace bien su trabajo, ¿por qué no lo despiden o lo inhabilitan? Hay profesionales que se buscan la vida con dietas «de fotocopia» «1000 cal» etc. Y apáñate la vida, que si no adelgazas es que eres muy vago. Da igual que la genética sea muy perra, que no tengas ni idea de que una dieta con 155 gr de carbohidratos no es lo mismo que una de 50 y más grasas, si total, las dos tienen las mismas calorías. Sacan dietas con la misma facilidad que uno saca una tira de papel higiénico antes de visitar al sr. Roca (y no me refiero al cocinero).
Yo tengo claro que aquí hay intereses y por eso no interesa solucionarlo. Persona obesa, persona abandonada y deprimida. Mayor predisposición a la desidia, enfermedades (cardíacas, diabetes…) y a trastornos psicológicos y psiquiátricos (depresiones, ansiedad, etc). Mayor consumo de fármacos, dependencia y para la saca de las farmacéuticas y otras entidades (como organizaciones de supuestas eminencias de la endocrinología, entre otros).
Amén.
La cuestión es si dejar el tratamiento [de la obesidad], poniendo a todos esos especialistas sin trabajo, a la vista de la incesante demanda popular.
La inercia se alimenta a sí misma, siendo la imposibilidad de cambiar los propios hábitos el argumento silencioso para justificar que no es necesario cambiar nada
«Tenemos que dejar de recomendar tratamientos inefectivos para pérdida de peso»
Médicos y nutricionistas no tratan la obesidad con dieta hipocalórica por el bien del cliente, sino porque es el negocio del que ellos viven. Y como parte del engaño te van a decir que la culpa de que el tratamiento no funcione es tuya, porque no te esfuerzas.
Hacemos como que vivimos en un mundo donde la nutrición exige pruebas científicamente rigurosas de que los tratamientos prescritos son efectivos. Entonces, ¿dónde están los estudios que muestran que reducir las calorías provoca una pérdida de peso a largo plazo?
Los caloréxicos no necesitan pruebas científicas porque pueden demostrar que funciona usando las palabras.
Ante la duda, consulta a tu gym-bro más cercano.