«La obesidad, por definición, es un descontrol de los impulsos»
¿Por definición? Menuda burrada: es confundir lo que dice una teoría estúpida y pseudocientífica con la definición de una condición fisiológica.
«Hypothalamic and Genetic Obesity in Experimental Animals: an Autonomic and Endocrine Hypothesis«
Our discussion of hypothalamic obesity could take many points of departure and move in one of several directions. It could focus on the behavioral aspects of the obese animals, since all obesity results from an excess intake of energy relative to energy expenditure. Since energy is obtained from food, and the ingestion of food is a behavioral process, this would be a rational approach and has been taken by some recent reviews in this field
Nuestra discusión sobre la obesidad hipotalámica podría tomar muchos puntos de partida y moverse en una de varias direcciones. Podría centrarse en los aspectos conductuales de los animales obesos, ya que toda obesidad resulta de una ingesta energética excesiva en relación con el gasto energético. Dado que la energía se obtiene de los alimentos, y la ingestión de alimentos es un proceso conductual, éste sería un enfoque racional y ha sido asumido en algunas revisiones recientes en este campo
Es la estúpida y pseudocientífica «teoría del balance energético». En este caso publicada hace 40 años.
Toda obesidad resulta de una ingesta energética excesiva en relación con el gasto energético
En toda acumulación de energía en un órgano/tejido entra más energía en el órgano/tejido de la que sale. Pero de ninguna manera de eso se deduce que se acumule en el órgano/tejido porque entra en el cuerpo más de la que sale (ver,ver,ver).
- ¿Crece un niño porque come más de lo que gasta? No. La causa es hormonal/fisiológica.
- ¿Crece el músculo porque comemos más de lo que gastamos? No. La causa es hormonal/fisiológica.
- ¿Crece un tumor porque la persona come más de lo que gasta? No. La causa es hormonal/fisiológica.
- ¿Crece el cuerpo de una mujer embarazada porque come más de lo que gasta? No. La causa es hormonal/fisiológica.
- ¿Crece el cuerpo de un niño que sufre de gigantismo porque come más de lo que gasta? No. La causa es hormonal/fisiológica.
En todos los ejemplos anteriores cuando los tejidos crecen hay acumulación de energía en los tejidos, y en ningún caso la causa del crecimiento es que consumimos más energía de la que gastamos. En ningún caso. Y las leyes de la física son las mismas para la obesidad y para cualquier otro crecimiento de un tejido vivo.
Toda obesidad resulta de una ingesta energética excesiva en relación con el gasto energético
No. No hay razones para pensar que ésa es la causa. De hecho, es una estupidez incuestionable creer que esa idea deriva de las leyes de la física.
El gigantismo resulta de una ingesta energética excesiva en relación con el gasto energético.
El crecimiento de un tumor es, por definición, un descontrol de los impulsos.
Si ganas peso porque te está creciendo un tumor, has comido por encima de tus necesidades energéticas, ¿no? ¿Se define en tal caso el crecimiento de un tumor como un descontrol de los impulsos? ¿Si crece es porque no has comido la cantidad de comida correcta? (ver)
A partir de ese error, a partir de esa descomunal estupidez, viene el resto de la charlatanería energética: puesto que la obesidad es el resultado de «comer más de la cuenta» y comer es un comportamiento, la obesidad tiene su causa en un comportamiento inadecuado. Y cuando el tratamiento fracasa, la causa está clara: aguantaste comer con moderación durante un tiempo, pero has vuelto a comer «de más».
Para no recuperar tu peso te va a tocar cambiar a largo plazo (durante toda tu vida) el consumo/gasto de calorías. Si vuelves a las kcal iniciales y al gasto inicial, vuelta al peso inicial (o superior). Visto esto, es fácil entender el motivo de que las dietas como tal no funcionen nunca. Se trata de un cambios de hábitos, un cambio de estilo de vida. Alejandro Gayo
Ésta es la situación en la que estamos: los «expertos» en obesidad son incapaces de salir de la charlatanería que vienen repitiendo durante los últimos 80 años. Y esta increíble estupidez tiene víctimas: la población obesa, y también los que no son obesos pero que lo serán por culpa de confiar en que nuestras instituciones son competentes en materia de nutrición y obesidad.
Leer más:
- “Tenemos que dejar de recomendar tratamientos inefectivos para pérdida de peso”
- Si es cierto que “comer menos” NO adelgaza, ¿cómo es que nadie nos lo dice?
- 18 estudios en que los participantes “comieron menos” y no funcionó
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- Calorías. ¿Qué hay de verdad en todo esto?
- ¿Qué dice la Primera Ley de la Termodinámica?
Un titulado en nutrición no es un científico.
Un titulado en nutrición ha sido formado en pseudociencia.
A mí me da igual el titulito que tenga una persona: me importan sus argumentos. Aquí está mi reto para los defensores de la pseudociencia del balance energético:
Se busca caloréxico inteligente para contestar a unas sencillas preguntas
Si no pueden contestar, el titulito se lo pueden comer con patatas.
Me parece 100 veces más «científico» un ingeniero que un «nutricionista».
Por favor, ¿qué titulación es «nutricionista»?
La falacia de autoridad es un camino sin salida. Es mejor no entrar al trapo: lo que importa es lo bueno o malo que es un argumento, no el título que tiene quién lo defiende.
Esta estupidez es la base del tratamiento oficial de la obesidad:
La obesidad se desarrolla cuando la ingesta energética supera al gasto energético.
¿Por qué no se afirma lo mismo en el resto de crecimientos de tejidos/órganos? Pues porque es mentira.
La obesidad se define como una condición de acumulación anormal o excesiva de grasa en el tejido adiposo, hasta el punto de que la salud se deteriora
Definición sin estupideces caloréxicas.
Vicente, te van a «encantar» algunas de las afirmaciones que te encontrarás en el especial sobre obesidad de Planeta Futuro en El País: https://elpais.com/elpais/2018/09/24/planeta_futuro/1537808159_599868.html
A partir de ahí, no sigo leyendo.
He cometido el error de seguir leyendo…
En nutrición, cuando sueltas estupideces como camiones te hacen catedrático. A ver en la asignatura de ética cómo analizan estar tratando la obesidad con una teoría pseudocientífica que es claramente errónea (ver,ver). ¿Ética? Menudas risas tiene que haber en esa asignatura.
https://novuelvoaengordar.com/2018/09/27/la-etica-del-dietista-nutricionista/
Tenemos la charlatanería instalada cómodamente en nuestras universidades, pero estamos preocupados por la homeopatía.
Quisiera ver la evidencia científica que respalda los tratamientos que usa el señor Pablo Ojeda con sus clientes para tratar la obesidad. Por supuesto hablamos de perder una cantidad considerable de peso (20-25 kg) y mantener lo perdido a largo plazo (4-5 años).
La dieta hipocalórica es un tratamiento de origen pseudocientífico y que ha fracasado sistemáticamente en los experimentos científicos. Tengo curiosidad por saber en qué consiste el tratamiento con respaldo científico por el que cobra.
Dos mecanismos básicos por los que engordamos: lipogénesis, o llenado de los adipocitos ya existentes, y adipogénesis, o creación de nuevos adipocitos a partir de preadipocitos. ¿Importante para entender por qué engordamos o qué hacer para adelgazar, si es que es posible? No, mejor tiramos de prejuicios y recurrimos a una ley de la física que nada tiene que ver con el funcionamiento de nuestro cuerpo para, mediante injustificadas premisas, sustituir lo que sabemos de fisiología por una operación matemática. ¡Semos los profesionales!
La masa del tejido graso está regulada por alteraciones tanto en el número de adipocitos (adipogénesis) como en el tamaño de las células (lipogénesis, Prins y O’Rahilly, 1997). La adipogénesis es el proceso de desarrollo de células adiposas maduras a partir de células precursoras preadipocitos y está controlada por dos factores clave de transcripción: CCAAT / proteína de unión a potenciador a (C/EBPa) y receptor g activado por proliferador de peroxisoma (PPARg) (Wu et al. , 1996; Zuo et al., 2006). La lipogénesis es el proceso de acumulación de lípidos y está regulada por la proteína de unión al elemento regulador de esteroles 1 (SREBP-1), un factor de transcripción implicado en la biosíntesis de lípidos (Raghow et al., 2008). La acumulación total de grasa en los adipocitos está determinada por el equilibrio entre la síntesis de lípidos (lipogénesis) y la degradación de los lípidos (lipólisis/oxidación de ácidos grasos; Avram et al., 2005a, b).
La falsa creencia de que el exceso de grasa corporal es causado por comer demasiadas calorías y no hacer suficiente ejercicio le da a la sociedad una razón lógica para culpar a las personas obesas por su lamentable situación.
Esas falsas creencias son las que sustentan el estigma, aunque los que las propagan se pongan medallas por luchar contra el fat-shaming. Bomberos pirómanos.
Si dejamos de lado la cansina e inútil creencia de que la obesidad es causada por comer demasiado y hacer poco ejercicio, y la reemplazamos con un entendimiento científico sobre las causas fundamentales, no sólo podemos brindar esperanza y ayuda a las personas que ya padecen obesidad, sino también potencialmente comenzar a revertir las tendencias globales al educar a las personas sobre cómo prevenir la obesidad en primer lugar.
O podemos definir la obesidad como un «descontrol de los impulsos» y seguir considerándola un problema de comportamiento en el que ya sabemos cuál es la causa.
La expansión del tejido adiposo blanco (WAT) que define la obesidad puede ocurrir a través de la hipertrofia de los adipocitos (llenado de lípidos) y la hiperplasia (adipogénesis o aumento de la diferenciación de las células precursoras de los adipocitos en adipocitos), pero los mecanismos que controlan estos procesos aún no se han definido completamente
Otra definición «cacao mental» de la obesidad:
¿Sí, es así cómo se define la obesidad? ¿Una alteración bioquímica hormonal? La alteración que nos hace comer más y movernos menos. La «hipótesis hormonal» era el subtítulo de la siguiente figura (¡¡no es una broma!!):
¿Puede ser que la causa de la obesidad sea un «error» en nuestro cerebro que nos hace «comer más y movernos menos»? Una versión más de la Teoría CICO, que supone obvio que engordamos porque comemos «más de la cuenta».
Copio aquí el comentario dejado en otro hilo del blog:
Hola Pablo,
me llamo Vicente, no Sergio.
Estás claramente citado como autor de la frase. Creo que la frase es autosuficiente y no necesita el resto del texto del tuit para que se entienda lo que dices. En cualquier caso, pinchando en la imagen se puede consultar el resto de tu tuit.
Dices que la obesidad tiende a regresar en ausencia de un cambio de hábitos. ¿Qué cambio de hábitos sirve para que no vuelva? Te pregunto por evidencia científica del método que tú usas con tus clientes y que sirve para perder el peso que nos sobra (e.g. 25 kg) y no recuperarlo a largo plazo (e.g. 4 años). Insisto: evidencia científica de unos hábitos que funcionen para perder una cantidad importante de peso y mantener lo perdido a largo plazo, no «pensamientos», ni «charlatanería termodinámica».
En cuanto a si he malinterpretado lo que estás diciendo, creo que para nada. Creo que tus creencias sobre la obesidad son charlatanería pseudocientífica.
Gracias por tu feedback.
Un saludo
Los nutricionistas, por definición, son un descontrol de los impulsos.
Si alguien conoce la evidencia científica en la que se basa recomendar el consumo de esas 5 piezas de fruta y verdura, que lo diga.
La opinión de un titulado en nutrición no es evidencia científica.
La opinión de la OMS no es evidencia científica.
http://www.zoeharcombe.com/2014/04/the-perfect-five-a-day/
http://www.zoeharcombe.com/2014/04/seven-a-day-fruit-and-veg/
http://www.zoeharcombe.com/2012/03/five-a-day-the-truth/
Decir lo primero que se te ocurre, sólo porque lo has escuchado decir a otros, no es informar.
Estimado Vicente está claro que eres un gran teórico pero cualquiera que te escuche y que pase horas en consulta y haya leído solo un poquito, ya sabrá que pacientes has vistos poco y que libros a parte de fisiología no sé si lees muchos más( son muy importantes) pero intentar separar la parte psicológica y la fisiológica en la perdida de peso ya te digo que no vas desencaminado.
No soy yo precisamente quien debe desmontar esa teoría ya que esta solidamente demostrada. Obviamente puedes poner mil estudios sobre procesos metabolicos, pero no encontraras ninguno donde un abordaje multidisciplianar no haya sido efectivo en alguna medida. Te invito a ello.
Aquí te dejo la última nota de prensa de la sociedad española de la Obesidad y de Endocrinologia y el enlace del colegio de Psicologos de Cataluña donde da la casualidad qeu hablan del tema.
Sin más recibe un cordial saludo.
NOTA DE PRENSA
En el marco del Día Mundial de la Lucha contra la Obesidad, la Sociedad Española de la Obesidad (SEEDO-SEO) y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) han desarrollado la campaña ‘LA OBESIDAD TAMBIÉN ESTÁ EN LA CABEZA” para hacer alusión a que los aspectos psicológicos ligados a la obesidad están presentes antes y después de desarrollarla. Para ello han contado con la participación de miembros del Col.legi Oficial de Psicologia de Catalunya (COPC).
Las personas con obesidad presentan un riesgo superior a padecer trastornos y alteraciones psicológicos que las personas con normopeso
La obesidad, definida como un exceso de grasa, es una enfermedad crónica de tendencia epidémica en el mundo y constituye uno de los retos más difíciles de abordar en salud pública. En España, según el estudio ENPE publicado en 2017, el 39,3% de la población tiene sobrepeso y un 21,6% obesidad.
La obesidad afecta negativamente a la salud global, y se asocia a otros factores de riesgo cardiovascular como hipertensión arterial, diabetes, dislipemias, y apneas del sueño.
Además, la obesidad tiene un alto índice de comorbilidad con psicopatologías, tales como la ansiedad, la depresión, ciertos trastornos de la conducta alimentaria como el trastorno de atracones, bulimia, entre otros.
Así, según los expertos, un 30% de las personas obesas que acuden a terapia expresan tener rasgos de bulimia. Además, un 50% de los pacientes con impulsos bulímicos también presentan depresión.
Tratar y entender los trastornos de tipo afectivo como la ansiedad o la depresión en personas obesas resulta clave para un buen pronóstico. Es la base necesaria para que el paciente se comprometa a realizar el tratamiento y cambiar sus hábitos de vida.
https://mail.google.com/mail/u/0/#inbox/FMfcgxvzLhZWDFzFBcFblTBXPMWcnGSC?projector=1&messagePartId=0.1
Hola Pablo,
agradezco que guardes las formas en tu respuesta (lo digo sin ánimo de insinuar que no las has guardado en algún momento).
Responderé a tu comentario, posiblemente en una nueva entrada del blog, pero en las próximas horas tengo bastante lío en el trabajo y no sé predecir cuándo podré responder. Aunque veas que publico una o dos entradas antes de contestar, no interpretes que lo he olvidado, pues ya las tengo escritas.
Un cordial saludo
Me doy por «etiquetado».
Me flipa que alguien se invente que hay personas que le odian para intentar hacerse el mportante. No le odiamos, sino que más bien lo que ocurre es que nos da pena: por un lado, por no tener el suficiente intelecto para enterder la insensatez de la teoría CICO, a pesar de los múltiples ejemplos que Vicente ha puesto a disposición de quien quiera escuchar; por otro lado, esa pena también la sentimos por tus pacientes, porque apañados están si la solución tiene que derivar de la teoría CICO.
Por tanto, que te quede claro: no te odiamos, simplemente nos das pena.
Pues sí, cientos de entradas del blog explicando las falacias en las que se basa su ideología las resume como que soy su «odiador». Y le pone contento saber que está tratando y cobrando a sus clientes por pseudociencia que, además, tiene toda la evidencia científica en contra. Si tiene un mínimo respeto por sus clientes, debería dejar la arrogancia a un lado y prestar atención a la crítica a sus ideas.
Mi respuesta a su comentario:
https://novuelvoaengordar.com/2018/11/15/mi-respuesta-a-pablo-ojeda/
Como dice Taleb, no se debate para convencer al oponente, sino para informar al público.
¿En qué crecimientos de tejidos el balance energético total del cuerpo produce el crecimiento?
Creer en CICO se entiende. Insistir en el error cuando ya sabes que es charlatanería es lo que no tiene perdón.